“MENTAL PLAYGROUND”

Texto por Georgina Valdez Cristofani.



El laberinto más complejo que nos toca atravesar es el de nuestra propia mente. De día nos encierra dentro de un cuerpo, donde el ego dicta juicios y sentencias propias que nos hacen navegar en un mundo repleto de dictámenes ajenos. De noche nos pasea fuera de los límites de la razón, hacia un territorio desconocido que habita dentro de nosotros.

Esta exposición es una puesta en escena, un pequeño teatro donde se manifiestan una serie de ficciones que nos ayudan a entender cómo opera nuestra mente.  Las mentiras que creemos se convierten en verdad porque las creemos?

Un frasco se cae y al golpear contra el piso derrama su contenido; las pastillas quedan desparramadas por el suelo de la sala, fuera de escala, como si un gigante que sufre terribles dolencias acabara de tener un colapso. Las píldoras reúnen un vademecum publicado por la OMS con la lista de drogas más usadas, donde la artista que las crea, Theresa Hattinger, elabora nuevas palabras combinando arbitrariamente raíces con desinencias de los medicamentos. En esta acción se produce un doble sentido, por un lado se crean nuevas combinaciones de drogas, con efectos de lo más inciertos para la mente y el cuerpo humano, y por el otro se crean palabras incongruentes dignas del vocabulario de una persona bajo la influencia. En el horizonte se dibuja un mural de la artista Julieta Marasas, que añade a la escena un tinte rojo esfumado, que bien podría estar pintada con sangre de neón. El mural es una trama de stencil que se configura entre nubes, rayos y fuegos, cuyo negativo forma una x expansiva, como si una explosiòn nuclear estrellada y simètrica se convirtiera en un hermoso wallpaper. Mientras, en el resto de las piezas de esta sala apocalíptica al fondo de la galería, el metal y el vidrio enfrían lo que la luz del neón y el rojo del fuego calientan.

Una bandera de protesta dictamina:

NO HAMOS LUDOS
MUIRA DIA COPES
CONDO PUEE SEIAS
HOO DIY MIGAR
NMOS ESTAEDE TOER

En la frase hecha con técnica copy/paste analógico se deconstruyen y rearman frases que Hattinger, de origen austriaco, encuentra por azar en las calles de la ciudad de Buenos Aires. La pieza se centra en develar las frases ocultas a partir de las pistas que la artista propone desde el diseño, como un rompecabezas gràfico que nos ayuda a desentrañar los caminos obvios de nuestra mente vaga.

El paisaje que se despliega entre las ventanas se compone de hojas metálicas con dibujos serigrafiados en capas sucesivas de pintura automotriz. La pieza remite a un comic en donde, cada viñeta funciona de forma aislada, pero a la vez son parte de un relato más grande; desde el cielo los pájaros/culos irradian una fuerza que atrae la gravedad de la tierra, mientras que desde el espacio aéreo nubes con ojos nos observan y estrellas blandas sueñan con la lluvia ácida. Frente a esta escena dantesca futurista, en un plano más terrenal, una ciber araña codifica en lenguaje 8 bit un mensaje del exterior.

La escena se completa con la flameante bandera NOW, la cual, como salida de la película They Live!, nos alerta que la conciencia es un estado del presente, nos llama a despertar como quien es sacudido de un sueño. Junto a esta, en dos chapas vemos unas células que se cocinan a las llamas, signando un futuro transgénico.

La casa/mesa del comedor se activa con la performance de Xul, el gato de la galería, que abre las puertas desde adentro para jugar con los que pasan por el costado. La misma sala la coronan una instalación de conos de seguridad a cuadros, una bolsa de Materia Prima y una gran X estrella hecha de nubes que irradian un aura gaseosa.

Desde la vereda, una Lengua trabalenguas se agita entre las ventanas

Mental playground es un espacio de juego para que como adultos nos permitamos la ternura a la hora de enfrentarnos a temas complejos. Es, por un lado, un rompecabezas lingüístico, y, por el otro, una historieta que en viñetas va contando un futuro apocalíptico. Ambas artistas juegan cada cual con sus juguetes, pero juegan juntas, creando un mundo posible desde dos miradas muy opuestas pero complementarias. Lo blando de los textiles estridentes y plásticos de Theresa en contrapunto con las piezas metálicas y robóticas de Julieta. Las dos aceptan el desafío de la galería de exhibir juntas a pesar de que las separa una cultura visual transoceánica.


***

“Mental playground”. Muestra de Theresa Hattinger y Julieta Marasas.

Curaduría: Georgina Valdez Cristofani 

The White Lodge - Home Gallery. Emilio Olmos 15. Piso 4. Depto N. Ciudad de Córdoba. 

Inauguración: 2 de junio del 2023.
Cierre: 11 de agosto del 2023. 

 

 


 



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